Es notable el impacto del comercio electrónico en las relaciones internaciones como mecanismo de compra y comunicación. Un auge que nos lleva a considerar que estamos ante una fuente material que resulta influenciable de manera notable en el derecho aduanero y además, da paso a una nueva era que impone un renacimiento del «sistema jurídico aduanero. Este renacimiento no alcanza con meras modificaciones de la normativa de rito sino que exige un nuevo sistema en materia de derecho aduanero para regular esta nueva relación comercial entre las personas del mundo.
Desde su inicio, la mecanización operativa aduanera donde la base del ejercicio de tal acción en procura de regular el ingreso y/o egreso de mercaderías se sustentaba en la declaración escrita y con soporte físico de un control fiscal, fue evolucionando, hasta llegar a la introducción de sistemas informáticos a la hora de cumplir con las declaraciones y controles.
A partir de estos cambios introducidos por necesidad de incorporar un sistema informático a las destinaciones aduaneras, han llevado a necesidades de interpretación jurídica por los efectos de los actos producidos mediante estos sistemas informáticos y que necesariamente debían conjugarse con el orden normativo que no detentaba estas nuevas formas operatorias aduaneras en el Código Aduanero Argentino de 1981.
La jurisprudencia fue sirviendo para ir saneando algunos de estas lagunas, hasta llegar en el año 2005 a generar modificaciones en el propio Código Aduanero, mediante la ley 25.986, por la cual, se incorpora la declaración informática como también, sus efectos en los artículos 234; 332; 225 y c.c. de la ley 22.415.
Empero, aún cuando han existido estas incorporaciones al Código Aduanero, el sistema informático ha tenido una evolución tal en el comercio exterior de gran impacto en la actualidad donde Internet se presenta como una herramienta de comunicación y un ámbito de comercialización.
Un ámbito que genera posibilidades de realizar transacciones comerciales, acuerdos, medios de pagos y hasta ser un canal de ingreso|egreso de las mercancías.
A partir de ello, podría visualizarse al e-commerce como una nueva mecanización operativa que resultaría ser una fuente material del derecho aduanero y hasta quizás, podría considerarse como la nueva y la principal fuente material sobre la cual, deberían asentarse las bases de un nuevo orden jurídico aduanero.
Es evidente entonces, que este momento de la historia está actuando invasivamente sobre las fuentes que oportunamente han inspirado la redacción del derecho aduanero, imponiendo rediseñar el sistema jurídico aduanero a los fines de adecuar a la Aduana, como organismo público, al nuevo marco que rige el comercio de las naciones, dejando atrás las tradicionales formas comerciales y operativas aduaneras.
Esa nueva fuente material, de ningún modo se alejaría de la esencia que, desde el nacimiento de la palabra aduana, ha sido la exactitud y la confianza en la declaración del importador o exportador.
Por el contrario, el derecho aduanero conjugado con sus fuentes naturales y la esencia de quien actúa como controlador de los ingresos y egresos de mercadería, tiene un factor que engloba el punto de partida de todo y éste es sin duda, la exactitud.
Desde antaño, cuando los sistemas de importación y exportación eran regulados por la antigua Roma, la declaración de lo que se extraía era fundamental que esté alineada con la exactitud y actualmente, aún habiendo evolucionado a gran escala el mecanismo de la exportación e importación, perdura como elemento esencial, siendo el bien tutelado por excelencia del derecho aduanero o sistema jurídico aduanero.
Empero, el avance del e-commerce establece mantener ese bien tutelado como es la exactitud y hasta involucrar en mayor grado la declaración de confianza que se evidencia en la necesidad del encuadre de un sistema jurídico aduanero el cual sirva, para que los protagonistas del comercio exterior como también quien tiene la potestad de control, incorporen esta actual forma de comercio internacional y su manera operativa a través de un nuevo sistema jurídico aduanero y una Aduana digital para un mejor ejercicio de control.
Tal como se señaló al inicio, si las causas históricas han influenciado en la generación de ciertas normas resultantes de factores ideológicos, sociales, económicos, denominadas fuentes materiales, esto implica que actualmente, el e-commerce sería la actual fuente material en materia aduanera al ser el factor social y económico que está inmerso en la vida las personas ante el auge de internet .
Por lo tanto, este momento de la historia impulsa a realizar cambios como elaborar un nuevo sistema jurídico en materia aduanera para agilizar las relaciones comerciales entre las naciones y hacer posible que los seres humanos tengan una vida mucho mejor.-
El autor es abogado. Vocal del Instituto de Derecho Aduanero y Comercio Internacional de la Asociación Argentina de Justicia Constitucional.