Imagine un escenario donde las fronteras físicas ya no son suficientes para contener el inmenso volumen de datos que circula en tiempo real, determinando el éxito o el fracaso de transacciones a miles de kilómetros de distancia. La Inteligencia de fuentes abiertas (OSINT) no es solo una herramienta tecnológica, sino una extensión de las propias fronteras, una lente que trasciende las limitaciones geográficas y pone el foco en lo invisible, en lo digital.
Este concepto, profundamente explorado en el estudio de la Organización Mundial de Aduanas (OMA) (1), revela el poder transformador de la OSINT. Se trata de una revolución que va más allá de las prácticas tradicionales de control aduanero. Las aduanas, históricamente centradas en verificaciones físicas y documentales, ahora ingresan en un universo de datos abiertos extraídos de redes sociales, sitios de comercio electrónico e incluso dispositivos conectados. Este nuevo arsenal de información ofrece una visión que -hasta hace unos pocos años- parecía salida de la ciencia ficción.
El estudio de la OMA: reimaginando las aduanas
El informe de la OMA, que sirve como base para esta transformación, explora cómo la OSINT puede usarse para rastrear fraudes e identificar esquemas de contrabando, actuando como una fuerza invisible que permea las transacciones globales. En situaciones de fronteras frágiles, la recopilación de datos públicos permite que las aduanas intercepten actividades ilícitas antes de que las mercancías lleguen a los puntos de inspección. Es como si, de repente, las aduanas estuvieran presentes en cada rincón del comercio global, aunque físicamente lejos.
Este estudio ejemplifica el potencial de la OSINT al rastrear, por ejemplo, movimientos sospechosos en redes sociales o foros donde los criminales discuten estrategias para eludir las leyes aduaneras. Usando herramientas como Google Hacking y Shodan, las aduanas se anticipan a los eventos, rompiendo con la lógica reactiva del pasado. El control se vuelve preventivo.
¿Qué es OSINT y por qué es importante?
La OSINT puede describirse como la capacidad de extraer inteligencia de fuentes abiertas y accesibles al público. Lo que antes era una avalancha de datos dispersos se transforma, mediante la aplicación de OSINT, en un cuadro coherente donde se pueden detectar patrones e identificar anomalías. Imagine un océano infinito de datos organizados en líneas de acción concretas, permitiendo que las aduanas y otros actores actúen con precisión quirúrgica.
Con el uso de técnicas como web scraping y el poder de la inteligencia artificial (IA), las aduanas pueden ver mucho más allá de las fronteras físicas. Y lo que antes era imposible de monitorear, ahora puede rastrearse en tiempo real. Imagine un flujo interminable de información proveniente de diferentes fuentes, recopilada, procesada e interpretada. La OSINT confiere un poder de vigilancia sin precedentes.
El primer paso para la plena utilización de la OSINT en las aduanas implica la construcción de una arquitectura tecnológica capaz de manejar la inmensa cantidad de datos que se extraen de redes sociales, sitios de comercio electrónico y dispositivos conectados. Esta arquitectura debe incluir sistemas robustos de big data y flujos de trabajo que recopilen, procesen y organicen los datos en tiempo real, haciéndolos operativos para las autoridades aduaneras. Además, la interoperabilidad entre los sistemas aduaneros de diferentes países es crucial para garantizar que la información pueda compartirse de manera segura y efectiva. No obstante, implementar una infraestructura de big data que sea suficientemente ágil y capaz de integrarse con sistemas de diferentes jurisdicciones puede ser un desafío monumental, especialmente en regiones con infraestructura tecnológica limitada.
Otro aspecto central de esta revolución es la integración de la inteligencia artificial con la OSINT para el análisis de los datos recopilados. Las técnicas de machine learning, tanto supervisadas como no supervisadas, permiten que las aduanas detecten patrones de comportamiento sospechoso e identifiquen fraudes o contrabando con mayor precisión. El uso de algoritmos de reconocimiento de patrones y detección de anomalías ofrece un poder predictivo considerable, anticipando amenazas incluso antes de que lleguen a las fronteras físicas. Sin embargo, la calidad de los datos disponibles es una preocupación constante. Los datos de fuentes abiertas pueden ser inconsistentes o incompletos, lo que dificulta el entrenamiento de modelos de IA eficaces. Así, la dependencia de grandes volúmenes de datos de alta calidad se convierte en una barrera significativa para la implementación exitosa de esta tecnología.
Además de los desafíos técnicos, la ciberseguridad y la privacidad de los datos emergen como áreas de gran preocupación. El volumen de información digital manipulada por las aduanas en tiempo real exige medidas rigurosas para proteger estos datos contra ataques cibernéticos y garantizar el cumplimiento de las regulaciones internacionales. La recopilación y el uso de datos públicos deben ser monitoreados cuidadosamente para evitar la invasión de la privacidad de individuos y empresas. Equilibrar la seguridad con la privacidad es uno de los dilemas más complejos que enfrentan las administraciones aduaneras, ya que el uso de datos sensibles para fines de vigilancia puede generar controversias éticas y legales.
Implicaciones profundas: más allá de la tecnología, una nueva realidad
Cuando hablamos de una aduana más allá de las fronteras físicas, nos referimos a la superación de paradigmas. El impacto de la OSINT va mucho más allá de una simple herramienta tecnológica: redefine el papel de las aduanas y amplía sus capacidades hacia territorios que nunca antes habían sido explorados. Para las administraciones aduaneras, esta transformación implica la necesidad de una reconfiguración profunda: una nueva mentalidad para lidiar con volúmenes inmensos de datos y, al mismo tiempo, una mayor integración con las fronteras digitales.
No obstante, esta capacidad también trae consigo nuevos desafíos. Si bien las aduanas se vuelven más eficientes y seguras, la dependencia de los datos genera una responsabilidad ética sin precedentes. El uso de datos públicos debe alinearse con las normativas internacionales de privacidad y protección de la información. La OSINT es una herramienta poderosa, pero su poder debe administrarse con cautela. El equilibrio entre seguridad y privacidad es el dilema que se presenta.
En los países en desarrollo, estos desafíos son aún más acentuados. La implementación de tecnologías avanzadas como la OSINT y la IA a menudo enfrenta barreras como la infraestructura insuficiente, la falta de recursos humanos calificados y presupuestos limitados. La ausencia de una infraestructura de TI adecuada puede impedir que estas naciones mantengan el ritmo de las innovaciones globales, creando una brecha tecnológica significativa en el sector aduanero. Por lo tanto, la adaptación de estas soluciones en contextos con restricciones de infraestructura y financiamiento es una tarea compleja, que requiere una planificación estratégica cuidadosa.
Otro desafío crítico en la adopción de OSINT es la escalabilidad de las soluciones. A medida que el volumen de transacciones globales continúa creciendo, las aduanas necesitan sistemas escalables que puedan manejar cantidades cada vez mayores de datos y nuevas amenazas. La implementación de soluciones que sean lo suficientemente flexibles como para adaptarse a diferentes escenarios y jurisdicciones es esencial. No obstante, mantener la relevancia de los algoritmos de IA a lo largo del tiempo, asegurando que se actualicen con datos actuales y sean capaces de lidiar con nuevas formas de fraude y contrabando, es un desafío continuo.
Por último, la capacitación de equipos y la gestión del cambio son aspectos fundamentales para el éxito de esta revolución en las aduanas. La transición de los procesos tradicionales de verificación física y documental al uso de herramientas tecnológicas avanzadas requiere un esfuerzo significativo para entrenar al personal y actualizar sus habilidades. El rol del despachante aduanero, por ejemplo, está cambiando drásticamente, exigiendo que desarrolle competencias en análisis de datos, ciberseguridad y colaboración internacional. Sin embargo, la resistencia al cambio dentro de las organizaciones públicas y la falta de mano de obra calificada son obstáculos que no pueden ignorarse.
El sector público: un nuevo horizonte para las aduanas
La aduana más allá de las fronteras físicas refleja un cambio de paradigma para el sector público. El uso de OSINT ofrece a las aduanas un grado de control que, hasta hace poco, era impensable. Imagine aduanas capaces de anticipar fraudes antes de que ocurran, utilizando datos recopilados en redes sociales, foros o incluso sensores conectados que monitoreen el movimiento de mercancías en tiempo real.
El estudio de la OMA destaca la importancia de la cooperación internacional. La OSINT permite que las aduanas de diferentes países colaboren de manera eficiente, compartiendo información y adoptando medidas conjuntas para combatir el crimen transnacional. Las fronteras físicas pierden su rigidez y las barreras se vuelven más fluidas a medida que el comercio global es monitoreado a un nivel hasta ahora inalcanzable.
Además, la adopción de tecnologías como la OSINT y la IA demanda inversiones iniciales por parte de las instituciones públicas. No obstante, estos desembolsos se justifican por el retorno que pueden generar a mediano plazo, trayendo más eficiencia y agilidad a las operaciones aduaneras, además de reducir el riesgo de fraudes. Al integrar estas nuevas tecnologías, las instituciones públicas promoverán un ambiente más seguro y transparente para el comercio internacional, lo que beneficiará a toda la cadena de valor.
De esta manera, la implementación de la OSINT en las aduanas también depende de una estrecha colaboración internacional. El intercambio de información entre distintas administraciones aduaneras debe ser eficiente y seguro, y esto solo será posible mediante la estandarización de datos y la creación de interfaces de programación de aplicaciones (APIs) que faciliten esta integración. Sin embargo, la coordinación de esfuerzos entre países con diferentes regulaciones y sistemas de TI es uno de los mayores desafíos para la globalización de las aduanas digitales. Además, muchos países aún utilizan sistemas obsoletos, que no son fácilmente compatibles con las nuevas tecnologías, lo que requiere inversiones significativas para modernizar sus infraestructuras.
El sector privado: desafíos y oportunidades
Por otro lado, para importadores y exportadores, esta nueva realidad tecnológica trae consigo la necesidad de una revisión completa de sus prácticas operativas. La aduana más allá de las fronteras físicas impone niveles de transparencia sin precedentes. El control ya no se limita solo a los puertos y zonas aduaneras; ahora se extiende a la monitorización continua de las interacciones digitales de las empresas, desde la comunicación interna hasta las transacciones en plataformas en línea, siempre en busca de señales de irregularidades o posibles violaciones de las normativas aduaneras. Esto exige que las empresas se adapten a un escenario de supervisión digital constante, donde cada movimiento puede ser analizado por herramientas de OSINT.
Las empresas que operan de manera legítima tienen mucho que ganar. La OSINT ofrece oportunidades para mejorar la gestión de riesgos, optimizar las cadenas de suministro y garantizar que sus operaciones estén siempre en conformidad con las regulaciones internacionales. Sin embargo, con esta nueva transparencia surge la necesidad de proteger los datos. La gestión de la privacidad de la información se convierte en un desafío central, lo que exige que las empresas inviertan en ciberseguridad para proteger sus operaciones contra ataques o filtraciones.
Como dijimos, las empresas que operan de manera legítima encuentran numerosas oportunidades en este nuevo contexto. La OSINT no solo es una herramienta para las aduanas, sino también para las empresas, permitiéndoles mejorar su gestión de riesgos. Utilizando las mismas herramientas de monitoreo de datos, las empresas pueden identificar amenazas a la conformidad con antelación, previniendo posibles problemas regulatorios antes de que se conviertan en sanciones o multas. Además, la optimización de las cadenas de suministro es una ventaja significativa. Con la mayor visibilidad del flujo global de mercancías y datos, las empresas pueden mejorar la planificación logística, reducir los cuellos de botella operativos y mitigar interrupciones en el suministro.
No obstante, con esta mayor transparencia también surgen nuevos desafíos críticos, especialmente en torno a la protección de datos. El manejo de grandes volúmenes de información digital genera una mayor vulnerabilidad a ataques cibernéticos y filtraciones de datos, lo que puede impactar negativamente a las empresas que no estén preparadas. La ciberseguridad, por tanto, se convierte en un pilar central en las operaciones empresariales modernas. Las empresas están obligadas a invertir en soluciones avanzadas de seguridad digital, como cifrado, detección de intrusiones y políticas robustas de gestión de datos, para proteger no solo sus operaciones, sino también la información confidencial de sus clientes y socios comerciales.
En última instancia, las empresas que sean proactivas en la adaptación de sus operaciones a las nuevas demandas tecnológicas no solo tendrán más posibilidades de evitar problemas regulatorios, sino que también estarán mejor posicionadas para aprovechar los beneficios de esta nueva realidad digital. La implementación de estrategias de cumplimiento predictivo, que utilizan herramientas de IA y OSINT para monitorear continuamente los riesgos de conformidad, puede transformar la forma en que las empresas abordan la fiscalización aduanera. Esto puede incluir, por ejemplo, la automatización de auditorías internas, el monitoreo de redes sociales para identificar amenazas potenciales a la cadena de suministro y el uso de análisis de datos para prever patrones de demanda y movimientos de mercancías.
De esta manera, quienes inviertan en infraestructura digital adecuada y en la capacitación de sus equipos tendrán una ventaja significativa en un escenario donde la transparencia, la conformidad y la ciberseguridad son indispensables para el éxito en el comercio internacional.
IA: un camino irreversible
La adopción de la IA ya se ha consolidado como una necesidad estratégica para el comercio global, con un impacto que va más allá de la eficiencia operativa. La capacidad de la IA para analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, identificar patrones de fraude y predecir comportamientos de riesgo a partir de datos abiertos la convierte en una herramienta esencial para las operaciones aduaneras modernas. No obstante, la implementación de estas tecnologías no está exenta de desafíos. A medida que la IA se integra más profundamente en las fronteras digitales, la complejidad de su uso aumenta, exigiendo no solo una infraestructura tecnológica robusta, sino también una fuerza laboral capacitada para manejar las herramientas y los desafíos éticos que acompañan esta revolución.
El reciente tratado internacional firmado entre Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea marca un paso importante en el establecimiento de directrices globales para el desarrollo y uso de la IA. El acuerdo, citado por el Financial Times (2), subraya la necesidad de equilibrar la innovación tecnológica con la protección de los derechos humanos y los valores democráticos, en un escenario donde las fronteras entre la privacidad y la seguridad se vuelven cada vez más difusas. Esta regulación busca asegurar que la IA sea utilizada de manera ética y transparente, previniendo abusos y garantizando que los avances tecnológicos sean beneficiosos para la sociedad en su conjunto. Al crear un marco regulatorio global, estos países esperan liderar el camino hacia la adopción responsable de la IA, sirviendo como referencia para otras naciones.
Además de las cuestiones éticas, la cooperación internacional será crucial para garantizar el éxito de la IA en las aduanas y en el comercio global. La integración de tecnologías entre diferentes países exige una colaboración estrecha, tanto en el intercambio de datos como en la creación de normas comunes que puedan aplicarse globalmente. Esto no solo aumentará la eficacia de las operaciones aduaneras, sino que también promoverá la seguridad global, ya que las amenazas en el comercio internacional, como el contrabando y la evasión fiscal, son de naturaleza transnacional. Por lo tanto, la adopción irreversible de la IA requiere un esfuerzo coordinado para construir un entorno regulatorio que sea tanto innovador como seguro, protegiendo el comercio global y las libertades individuales.
Nuevas competencias para los Despachantes Aduaneros
La llegada de la OSINT también exige que los despachantes aduaneros desarrollen nuevas competencias para atender las demandas de este nuevo escenario. El rol del despachante tradicional, centrado en la documentación y en el proceso físico, está cambiando. Ahora, los despachantes necesitan contar con:
1. Habilidades digitales: la familiaridad con herramientas de OSINT y plataformas de big data será fundamental.
2. Ciberseguridad: el conocimiento sobre protección de datos y privacidad será esencial, dado el volumen de información digital involucrada.
3. Análisis de datos: la capacidad para interpretar y analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, con el fin de prever y mitigar riesgos comerciales, será una habilidad muy valorada.
4. Colaboración internacional: el despachante debe actuar en redes globales, comprendiendo las regulaciones de diversos países y colaborando con entidades internacionales para garantizar la conformidad.
Además de estas competencias, otra habilidad emergente será la gestión de tecnologías de automatización, ya que la digitalización de las aduanas impulsará el uso de sistemas automatizados para el procesamiento de documentos y el análisis de transacciones. Los despachantes aduaneros tendrán que manejar plataformas integradas que utilicen inteligencia artificial para agilizar procesos, lo que reducirá el tiempo de respuesta y aumentará la eficiencia. Con ello, el papel del despachante será cada vez más estratégico, demandando una capacidad de toma de decisiones rápidas y basadas en datos precisos, en lugar de solo ejecutar tareas operativas repetitivas.
La adaptabilidad y el aprendizaje continuo también destacan como competencias esenciales. El escenario tecnológico está en constante evolución, y los despachantes tendrán que mantenerse al día con las innovaciones que vayan surgiendo, participando en entrenamientos regulares para actualizar sus habilidades. La capacidad para aprender nuevas herramientas tecnológicas rápidamente será un diferencial competitivo en el mercado laboral. Esto coloca una presión adicional sobre las entidades educativas y las asociaciones profesionales, que deberán ofrecer una amplia gama de entrenamientos y certificaciones enfocadas en el futuro digital del comercio global.
En este escenario de profundas transformaciones, se destaca la inversión estratégica de entidades representativas de los despachantes aduaneros en Brasil, como el SINDASP. Estas entidades no solo se anticipan a las demandas del sector, sino que también destinan recursos significativos al desarrollo de iniciativas académicas para capacitar tanto a sus asociados como a otros profesionales del sector privado. Un claro ejemplo es Educomex.org, que ofrece capacitación en áreas de vanguardia como la inteligencia artificial, JASON, los estándares de la OMA y el AFC, preparando a los profesionales para enfrentar los desafíos de la era digital y promover la colaboración participativa.
Estas inversiones, sumadas al apoyo de organizaciones como el SINDASP, serán cruciales para transformar a los despachantes aduaneros en protagonistas de la adaptación empresarial a las nuevas exigencias del comercio global.
Cuestiones éticas: el dilema de la transparencia
Esta revolución trae consigo un desafío moral inevitable: ¿hasta dónde puede llegar la recopilación de datos sin comprometer la privacidad? La ética en la aplicación de la OSINT debe ser cuidadosamente considerada. El estudio de la OMA deja en claro que la utilización responsable de datos públicos es crucial para garantizar que se respeten los derechos individuales. Empresas y gobiernos deben encontrar un equilibrio que permita la seguridad sin violar la privacidad.
La construcción de este equilibrio ético implica no solo regulaciones claras, sino también transparencia en la forma en que se recopilan y utilizan los datos. Los mecanismos de rendición de cuentas deben fortalecerse, asegurando que las aduanas y otras instituciones no abusen del poder que estas nuevas herramientas les confieren. Además, la anonimización de los datos y la implementación de políticas rigurosas de ciberseguridad pueden ayudar a mitigar los riesgos asociados con el uso indebido de información personal. Sin embargo, es crucial que estas medidas se revisen y actualicen constantemente para mantenerse al día con los rápidos cambios tecnológicos y la evolución de las amenazas cibernéticas.
El éxito de esta revolución en las aduanas también dependerá de un monitoreo continuo y de una evaluación eficaz de las soluciones implementadas. La definición de indicadores clave de rendimiento (KPIs) será esencial para medir el impacto de las herramientas de OSINT e IA, asegurando que entreguen los resultados esperados sin comprometer la ética y la privacidad. No obstante, adaptar estas métricas a las diferentes realidades regionales y culturales puede ser un desafío, exigiendo flexibilidad en el análisis de datos y en el control de calidad. Las organizaciones tendrán que trabajar de manera colaborativa para ajustar sus enfoques a las necesidades específicas de cada país, mientras mantienen un enfoque global en la seguridad y la protección de los derechos individuales.
Conclusión: el futuro está en marcha
Estamos frente a un camino sin retorno. La OSINT ya está cambiando la forma en que operan las aduanas y las empresas, y esta transformación sólo continuará profundizándose. La expresión “aduanas más allá de las fronteras físicas” encapsula este nuevo paradigma, donde el control va más allá de lo físico y visible. Ahora está presente en cada byte de datos, en cada transacción. Y para aquellos que sepan navegar en este nuevo océano de información, las posibilidades son infinitas.
Ciertamente, este será uno de los temas centrales durante la Conferencia de Tecnología de la OMA, que se celebrará en Brasil en noviembre, abordando no solo la IA, sino también otros temas cruciales para el comercio exterior. La implementación de tecnologías avanzadas como la OSINT y la IA será esencial para moldear el futuro de las operaciones aduaneras, aumentando la eficiencia, la seguridad y la cooperación internacional. Las transformaciones tecnológicas y sus implicaciones éticas estarán en el centro de las discusiones, llevando a las aduanas a un nuevo nivel en el escenario global.
De esta forma, la revolución silenciosa en las aduanas está en marcha, pero su implementación plena requiere un enfoque cuidadoso que abarque desde inversiones en infraestructura tecnológica hasta el desarrollo de nuevas competencias para los profesionales del sector. Aunque los desafíos son significativos, las oportunidades que ofrecen la OSINT y la IA para transformar las aduanas a nivel global son inmensas, y quienes logren navegar este nuevo mar de datos estarán mejor posicionados para enfrentar los desafíos del comercio internacional.
- Organización Mundial de Aduanas (2024). Estudio sobre OSINT y su aplicación en la vigilancia aduanera. Disponible en: www.wcoomd.org/-/media/wco/public/global/pdf/topics/enforcement-and-compliance/activities-and-programmes/security-programme/osint-report_final.pdf?db=web
- Murgia, M y Espinoza, J (5 de septiembre de 2024). US, Britain and Brussels to sign agreement on AI standards, Financial Times. Disponible en:https://www.ft.com/content/4052e7fe-7b8a-4c42-baa2-b608ba858df5
Despachante Aduanero, Licenciado en Ciencias Económicas y con un Master Business Administration en Gestión de Negocios por la Fundação Getulio Vargas (FGV). Co-fundador de EBIMEX Comércio Exterior y Director en el Sindicato de Despachantes Aduaneiros de São Paulo (SINDASP), Brasil. Se desempeña como Asesor de Marketing y Comunicación Institucional en la Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana (ASAPRA) y es miembro de la Cámara Brasileira de Produtos Farmacêuticos (CBFARMA) de la CNC. Posee certificaciones en Inteligencia Artificial por la OEA (Organización de los Estados Americanos) y en Marketing y Comunicación por el International Business Management Institute (IBMI), Alemania.
Investigador postdoctoral en la École de Technologie Supérieure (ÉTS) en Montreal, Canadá, con enfoque en modelado y simulación de sistemas de manufactura e integración de inteligencia artificial en procesos de toma de decisiones para la Industria 4.0. Ha publicado diversos artículos en revistas y ha presentado trabajos en conferencias, con intereses en inteligencia artificial, investigación operativa, optimización y sistemas de producción. Actualmente,se desempeña como Coordinador Operativo de la plataforma Educomex.org