✔Introducción
La incorporación de la variable ambiental en el ámbito aduanero no constituye únicamente un imperativo de época, ósea, no es una moda del momento; sino, una necesidad actual y con proyección al futuro: representa la maduración institucional de las agendas regulatorias que entrelazan el comercio, el desarrollo sostenible y la seguridad jurídica transfronteriza. Si históricamente las administraciones aduaneras se configuraron como instrumentos de control fiscal, defensa económica y protección del mercado interno, el siglo XXI impone una ampliación funcional que las reposiciona como vértices de la gobernanza climática internacional.
Este cambio de paradigma ganó densidad y legitimidad política con la celebración de la 29ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29), realizada en Bakú, Azerbaiyán, del 11 al 22 de noviembre de 2024, cuyo temario excedió los marcos diplomáticos tradicionales al insertar con claridad inédita la estructura aduanera internacional en el campo de la acción climática. Fue en ese contexto que Azerbaiyán presentó la Declaración de Bakú sobre Aduanas Verdes, documento que será oficialmente deliberado en las 145ª y 146ª sesiones del Consejo de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), previstas para junio de 2025 en Bruselas.
Dicha propuesta no representa apenas un gesto político, sino una transformación del alcance funcional de la aduana: de barrera económica a vector de sostenibilidad normativa. Su eventual aprobación implicaría la entrada formal de la temática ambiental en la arquitectura técnica de la función aduanera global. A este movimiento le corresponde, por simetría, una exigencia de reposicionamiento de sus principales operadores.
Este artículo analiza los fundamentos y las implicaciones de este proceso desde la perspectiva institucional de la Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana, organización con presencia activa en tres continentes (1) y representación legítima de miles de profesionales especializados en la interpretación y aplicación de la legislación aduanera. Se sostiene que los agentes profesionales de aduanas, tradicionalmente encargados de garantizar la legalidad y la fluidez de los flujos transfronterizos, son hoy actores técnicos centrales para la aplicación eficaz de la nueva gobernanza climática en el comercio internacional.
Entre los marcos regulatorios de la COP29 y los compromisos que surgirán en la COP30, que se celebrará en Belém do Pará (Brasil), del 10 al 21 de noviembre de 2025, este artículo afirma que las aduanas verdes solo serán viables si se apoyan en la competencia técnica de quienes las operan diariamente. Y que, en este nuevo ciclo, el sector privado especializado —liderado por los agentes profesionales de aduanas— debe dejar de ser un receptor pasivo de normas y asumir un papel activo en su formulación y ejecución.
✔1. La Declaración de Bakú y el Reposicionamiento de la Función Aduanera
La propuesta de la Declaración de Bakú sobre Aduanas Verdes, presentada formalmente por el Gobierno de Azerbaiyán durante la COP29, no es un acto ceremonial ni una manifestación diplomática vacía. Es, en realidad, una pieza normativa de inflexión histórica que propone reorientar el rol de las administraciones aduaneras en el contexto de la transición ecológica global. Su inclusión como tema deliberativo en las 145ª y 146ª sesiones del Consejo de la Organización Mundial de Aduanas (OMA) —programadas para junio de 2025 en Bruselas— marca el ingreso definitivo de la variable ambiental en la estructura funcional del sistema aduanero internacional.
La declaración plantea un nuevo mandato institucional: que las aduanas no solo cumplan funciones de recaudación y control económico, sino que asuman, de manera formal, una responsabilidad operativa en la implementación de compromisos ambientales multilaterales. Este planteamiento no surge en el vacío. Es resultado directo de un entorno internacional en el que el comercio de bienes y servicios ya no puede separarse de su impacto climático, de su trazabilidad ecológica ni de su legitimidad ambiental.
La aduana, como punto de intersección entre el mercado global y el marco normativo nacional, se encuentra en posición única para verificar, facilitar y condicionar el ingreso y egreso de mercancías en función de criterios de sostenibilidad. Sin embargo, esta expansión de funciones no puede implementarse eficazmente sin operadores técnicamente calificados. Y es aquí donde el agente profesional de aduanas emerge como figura clave.
Este profesional, reconocido por su habilitación legal y su competencia técnica, cumple el rol de mediador entre los operadores comerciales, los sistemas aduaneros, los órganos de control y el Estado. Es quien interpreta la norma, anticipa riesgos, gestiona autorizaciones y asegura la conformidad documental y sistémica de las operaciones. En el contexto de las Aduanas Verdes, su actuación se vuelve aún más relevante, ya que debe ser capaz de identificar productos regulados por convenios ambientales, clasificar correctamente mercancías con potencial impacto ecológico y garantizar que cada operación se alinee con la legislación ambiental vigente.
En síntesis, la Declaración de Bakú no solo redefine la función de la aduana: también revaloriza, en clave climática, la labor del agente profesional de aduanas como ejecutor técnico de la legalidad ambiental en las fronteras. Su implementación efectiva dependerá, en gran medida, del reconocimiento, la formación y la participación activa de estos profesionales en el diseño e implementación de la nueva gobernanza aduanera verde.
✔2. La OMA y la Consolidación Normativa de las Aduanas Verdes
La Organización Mundial de Aduanas (OMA) es el organismo técnico multilateral con mayor autoridad en materia de estandarización de procedimientos aduaneros a nivel global. Su función de armonización normativa, promoción de buenas prácticas y desarrollo de marcos jurídicos cooperativos le otorga un papel central en la transición hacia una arquitectura aduanera ambientalmente responsable. La inclusión de la Declaración de Bakú sobre Aduanas Verdes como punto oficial en la agenda del Consejo de junio de 2025 constituye un paso decisivo en esta dirección.
Desde la publicación de su Plan de Acción sobre Aduanas Verdes en 2023, la OMA ha dado señales claras de su intención de integrar la sostenibilidad como un eje estructurante de su estrategia institucional. Sin embargo, la Declaración de Bakú representa un salto cualitativo: no se limita a lineamientos programáticos, sino que plantea la posibilidad de establecer una base normativa común que oriente la actuación de las aduanas en materia ambiental, con repercusiones directas sobre el riesgo, la fiscalización, la facilitación y la cooperación internacional.
La consolidación normativa de esta agenda exige una visión multidimensional. No basta con enunciar principios: es necesario traducirlos en mecanismos concretos, protocolos aplicables y criterios objetivos que puedan ser implementados por los funcionarios públicos y por los operadores privados que actúan en la frontera. Entre estos últimos, el agente profesional de aduanas destaca por su proximidad funcional con los procesos de control, su conocimiento de los regímenes especiales y su capacidad para garantizar la conformidad normativa de cada operación.
En este nuevo contexto, se espera que las aduanas:
- Incorporen criterios ambientales en sus matrices de análisis de riesgo;
- Establezcan canales verdes para mercancías sostenibles o tecnologías limpias;
- Desarrollen capacidades para detectar irregularidades relacionadas con residuos peligrosos, especies protegidas o sustancias químicas restringidas;
- Promuevan la interoperabilidad entre sistemas aduaneros y autoridades ambientales.
Pero ninguno de estos objetivos será alcanzable sin la participación activa de los agentes profesionales de aduanas, quienes ya actúan como interfaz técnica entre la regulación y la operación. La OMA, al promover esta agenda, tiene la oportunidad —y la responsabilidad— de fomentar su inclusión en los espacios de discusión técnica, en los pilotos de implementación y en la evaluación de impacto de las futuras medidas.
Una aduana verde sin operador técnico calificado es una ilusión normativa. Y un marco de gobernanza climática que excluya a los agentes que garantizan su ejecución carece de viabilidad estructural. Por eso, la consolidación de esta agenda requiere no solo voluntad política, sino también inteligencia institucional. Y esa inteligencia ya existe: está en las manos, la práctica y la experiencia acumulada de los agentes profesionales de aduanas en todo el mundo.
✔3. El Agente Profesional de Aduanas como Ejecutor Técnico de la Sostenibilidad Fronteriza
La transición hacia una aduana verde no se construye únicamente a través de declaraciones políticas, reformas legales o inversiones en tecnología. Requiere, ante todo, de operadores competentes que comprendan el sistema, conozcan los instrumentos normativos y puedan traducir los compromisos internacionales en actos concretos de cumplimiento. En ese marco, el agente profesional de aduanas se presenta como actor técnico insustituible en la ejecución de la sostenibilidad en las fronteras.
Por definición, este profesional está legalmente autorizado para representar a importadores y exportadores ante la administración aduanera. Su rol no es meramente administrativo: es técnico, jurídico y operativo. Interpreta las normas, tramita licencias, verifica la documentación, anticipa riesgos y asegura que cada operación esté debidamente alineada con las disposiciones legales vigentes. En el nuevo paradigma de las aduanas verdes, su función adquiere una dimensión adicional: la de garante del cumplimiento ambiental en el punto más crítico del comercio internacional.
Entre las responsabilidades que hoy recaen —y recaerán con mayor intensidad— sobre los agentes profesionales de aduanas, se encuentran:
- La adecuada clasificación arancelaria de productos regulados por convenios ambientales multilaterales (como el Convenio de Basilea, la CITES o el Convenio de Estocolmo);
- La verificación de documentación de respaldo, certificados ecológicos y autorizaciones ambientales emitidas por órganos competentes;
- La utilización eficiente de plataformas digitales integradas (como ventanillas únicas o portales de comercio exterior) para la tramitación de documentos exigidos en procedimientos con impacto ecológico;
- La identificación y reporte de inconsistencias que puedan ocultar infracciones ambientales en el marco de operaciones aparentemente regulares desde el punto de vista fiscal.
En este nuevo entorno, el agente profesional de aduanas ya no es simplemente un facilitador del comercio: es un intérprete técnico de la legalidad ambiental. Su labor es esencial para asegurar que la sostenibilidad no se quede en el plano discursivo, sino que se convierta en una práctica operativa cotidiana, coherente con los compromisos asumidos por los Estados en las conferencias multilaterales sobre cambio climático y biodiversidad.
Por ello, resulta imprescindible que estos profesionales sean debidamente capacitados, reconocidos institucionalmente y consultados en los procesos de formulación normativa. No habrá aduana verde sin operadores con competencia verde. Y en las fronteras del siglo XXI, la sostenibilidad solo se materializará si va acompañada por la experiencia y la ética profesional del agente que actúa donde se cruzan la mercancía, la ley y el territorio.
✔4. Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana: Tres Continentes y Una Misión Técnica por la Sostenibilidad Aduanera
La Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana (ASAPRA), fundada en 1969 y con sede institucional en Montevideo, Uruguay, representa una de las organizaciones más consolidadas en el sistema aduanero global. Constituida por asociaciones nacionales de agentes profesionales de aduanas de Américas, Europa y África, tiene vínculos institucionales sólidos con organismos multilaterales como la Organización Mundial de Aduanas (OMA), la ALADI, la UNCTAD y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), además de Organizaciones Internacionales como BASC, ALACAT, Global Alliance Y Procomex.
Este alcance intercontinental otorga a la ASAPRA una legitimidad singular para participar en los debates estratégicos sobre el futuro de las aduanas. En un momento en que la sostenibilidad emerge como eje estructurante del comercio internacional y de la cooperación tributaria global, la ASAPRA reafirma su compromiso con la construcción de una aduana verde que sea técnica, viable y operacionalmente inclusiva.
Desde su rol representativo, la ASAPRA ha asumido responsabilidades concretas, tales como:
- Participar activamente en las reuniones del Consejo de la OMA, contribuyendo a los grupos de trabajo sobre facilitación, cumplimiento, innovación tecnológica y cooperación público-privada;
- Impulsar programas de formación continua en materia de sostenibilidad, comercio lícito, gestión de riesgo ambiental y cumplimiento regulatorio;
- Promover la articulación entre agentes profesionales de aduanas y autoridades nacionales para la implementación de políticas verdes en zonas primarias y secundarias de control;
- Servir como canal de diálogo técnico entre el sector privado especializado y los órganos de decisión en materia de políticas climáticas y aduaneras.
La Declaración de Bakú, y la posterior discusión que tendrá lugar en las sesiones del Consejo de la OMA en junio de 2025, representan para la ASAPRA una oportunidad de consolidar un posicionamiento histórico: el agente profesional de aduanas no es un simple ejecutor del despacho. Es un actor calificado, legítimo y necesario en la arquitectura de cumplimiento ambiental transfronterizo.
La experiencia acumulada por miles de agentes en toda la región —desde los grandes puertos del Cono Sur hasta los pasos fronterizos más remotos de Centroamérica— constituye un patrimonio institucional que debe ser movilizado para hacer realidad los compromisos de la COP29 y anticipar los debates estratégicos de la COP30, que se celebrará en Belém, en el corazón de la Amazonía.
En este trayecto, la ASAPRA reafirma su vocación de alianza. Porque la sostenibilidad no se decreta: se implementa. Y en el comercio internacional, nada se implementa sin quien conoce la práctica, domina la norma y defiende la legalidad con responsabilidad técnica: el agente profesional de aduanas.
✔5. De Bakú a Belém: Continuidad Geopolítica y el Simbolismo Amazónico de la COP30
La secuencia entre la COP29, celebrada en Bakú (Azerbaiyán) del 11 al 22 de noviembre de 2024, y la próxima COP30, que tendrá lugar en Belém do Pará (Brasil) del 10 al 21 de noviembre de 2025, no se limita a un relevo temporal en el calendario diplomático del cambio climático. Se trata de una continuidad geopolítica significativa que conecta dos regiones con desafíos ambientales estratégicos: el Cáucaso, zona de transición energética e integración logística euroasiática, y la Amazonía, bioma esencial para el equilibrio climático planetario.
La elección de Belém, situada en el corazón de la Amazonía legal brasileña, como sede de la COP30, constituye una decisión de gran simbolismo. Marca el reconocimiento explícito del rol de los países amazónicos y de las regiones de alta biodiversidad en la arquitectura de la transición ecológica global. Pero también impone una exigencia: demostrar que es posible conciliar protección ambiental, desarrollo sostenible y comercio internacional regulado. Y, en ese equilibrio, la función aduanera será crucial.
Las aduanas en la región amazónica enfrentan desafíos únicos: control de flujos fluviales de difícil trazabilidad, fiscalización de productos de origen forestal, combate al tráfico de especies silvestres, control de mercancías peligrosas y prevención de actividades extractivas ilegales. Ante este escenario, la noción de una aduana verde no es un lujo discursivo. Es una necesidad operacional para garantizar que los compromisos climáticos no sean traicionados en la práctica diaria del comercio fronterizo.
Y es precisamente allí donde el agente profesional de aduanas se revela como figura imprescindible. Este profesional es quien:
- Comprende la complejidad normativa que regula mercancías con impacto ambiental;
- Garantiza la correcta clasificación, documentación y tramitación de cargas sensibles;
- Actúa como nexo entre empresas, autoridades, plataformas tecnológicas y organismos ambientales;
- Conoce la realidad operativa de las aduanas periféricas, remotas y estratégicamente expuestas.
En Belém, la narrativa política deberá transformarse en propuesta técnica. Las declaraciones de intención deberán ceder espacio a planes de acción integrados. Y la aduana, más que nunca, será evaluada no solo por su eficiencia, sino por su capacidad de proteger recursos naturales, impedir delitos ambientales y viabilizar operaciones sostenibles.
La Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana se prepara para participar de ese proceso. Con base en su experiencia institucional, su red regional y su visión estratégica, propondrá una agenda concreta para fortalecer el papel del agente profesional de aduanas como operador legítimo de la sostenibilidad. Porque donde hay frontera, hay regulación. Y donde hay regulación, se requiere inteligencia técnica y responsabilidad profesional.
De Bakú a Belém, el mensaje es claro: la sostenibilidad no llegará a las aduanas por decreto. Llegará de la mano de quienes las conocen, las operan y las defienden con ética y competencia.
✔6. Conclusiones: La sostenibilidad como misión estructural de la aduana moderna
El trayecto que conecta la Declaración de Bakú (2024) con las expectativas de la COP30 en Belém (2025) redefine no solo el rol de la aduana en el comercio internacional, sino el alcance mismo de su misión institucional. De órgano fiscal y garante del orden económico, la aduana se convierte en agente de cumplimiento climático, de legalidad ecológica y de sostenibilidad operativa. Esta transformación no es meramente conceptual. Es normativa, técnica y funcional.
En este nuevo paradigma, los agentes profesionales de aduanas dejan de ser percibidos como intermediarios administrativos. Se consolidan como intérpretes técnicos de la legalidad ambiental en las fronteras, operadores especializados que, día tras día, traducen los compromisos multilaterales en decisiones concretas que afectan al flujo global de bienes, servicios y tecnologías.
Esta responsabilidad no puede ser asumida sin reconocimiento, sin formación y sin participación. Por eso, la Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana, en su carácter de organización internacional con presencia en tres continentes, reafirma su compromiso de:
- Defender la inclusión estructural del agente profesional de aduanas en los debates globales sobre gobernanza climática;
- Colaborar con las administraciones aduaneras en la construcción de modelos de sostenibilidad técnica;
- Promover estándares comunes que aseguren una implementación armonizada de las Aduanas Verdes;
- Y fortalecer las capacidades de sus miembros para enfrentar los desafíos del nuevo ciclo regulatorio ambiental.
La sostenibilidad no puede ser un accesorio. Debe convertirse en una función aduanera, con estructuras, protocolos y operadores capaces de materializarla. Y no habrá implementación efectiva si se excluye a quienes poseen el conocimiento, la experiencia y la responsabilidad directa sobre los procesos críticos del comercio internacional.
En las fronteras del siglo XXI, la sostenibilidad se ejerce. Y quien la ejerce, con competencia y compromiso, es el agente profesional de aduanas.
- América, Europa y África.
Referencias
- Azerbaiyán. (2024). Declaración nacional en el Segmento de Alto Nivel de la COP29. Conferencia de las Partes, CMNUCC. Disponible en: https://unfccc.int/documents/644666
- Organización Mundial de Aduanas. (2023). Plan de Acción sobre Aduanas Verdes. Bruselas: OMA.
- Organización Mundial de Aduanas. (2025). SC0238Ea – Programa de Trabajo del Consejo 145/146 – Junio 2025. Bruselas: OMA.
- Secretaría de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). (2024). Resumen de la Acción Climática Global en la COP29. Bonn: CMNUCC. Disponible en: https://unfccc.int/documents/644497
- CMNUCC. (2024). CMA.11(a). Nueva Meta Colectiva Cuantificada sobre Financiamiento Climático (NCQG). Bakú: Naciones Unidas. Disponible en: https://unfccc.int/documents/637131
- CMNUCC. (2024). Decisión -/CMA.6: Nueva Meta Colectiva Cuantificada sobre Financiamiento Climático. Bonn: Naciones Unidas.
Despachante Aduanero, Licenciado en Ciencias Económicas y con un Master Business Administration en Gestión de Negocios por la Fundação Getulio Vargas (FGV). Co-fundador de EBIMEX Comércio Exterior y Director en el Sindicato de Despachantes Aduaneiros de São Paulo (SINDASP), Brasil. Se desempeña como Asesor de Marketing y Comunicación Institucional en la Asociación Internacional de Agentes Profesionales de Aduana (ASAPRA) y es miembro de la Cámara Brasileira de Produtos Farmacêuticos (CBFARMA) de la CNC. Posee certificaciones en Inteligencia Artificial por la OEA (Organización de los Estados Americanos) y en Marketing y Comunicación por el International Business Management Institute (IBMI), Alemania.
Funcionario de la Dirección General de Aduanas de la República Dominicana, donde se desempeña en áreas vinculadas a la modernización aduanera y la facilitación del comercio.